Santiago Maratea es un influencer argentino que hace unos meses organizó una colecta para que Independiente, el equipo por el que simpatiza, pudiera pagar parte de una deuda que arrastraba con América de México. Su iniciativa tuvo tanta repercusión, y éxito, que acaba de dar a Newell’s Old Boys una idea para que los hinchas de este club de la ciudad de Rosario puedan ver vestido con su camiseta a Lionel Messi, quien está a días de desembarcar en la Major League Soccer (MLS) para jugar en Inter Miami CF.  

En sus historias de Instagram, red social en la que Maratea tiene 3,7 millones de seguidores, el joven calculó que si 100.000 hinchas de Newell’s Old Boys aportan mensualmente durante un año 16.000 pesos (unos 32 dólares), el club podría fichar al crack argentino.

El influencer aclaró que para sus cálculos utilizó las cifras que averiguó por Google. Y, en ese sentido, dijo que el pase de Messi valdría unos 40 millones de dólares y que Newell’s Old Boys necesitaría que unas 30.000 personas se unieran a sus 70.000 socios para hacer los aportes.

Santiago Maratea, de 31 años, saltó a la fama hace algo más de un lustro, a partir de un video en Instagram en el que se lo veía arrojándose una tostada en la cara. El joven, que en 2019 debió reponerse al suicidio de su madre, llegó a conducir un programa radial mientras sus niveles de audiencia en las redes sociales aumentaban de manera exponencial.

Aunque su explosión mediática ocurrió en 2020, durante la pandemia de coronavirus, en 2017 inició un camino solidario que lo ha acompañado hasta la actualidad, no exento de polémica. Ese año organizó una colecta entre sus seguidores y con lo recaudado donó una ambulancia a Misión Chaqueña, una pequeña localidad de la norteña provincia de Salta habitada por la comunidad wichi.

A partir de ese momento, Maratea ha liderado exitosas colectas para diferentes causas sociales, como las compras el año pasado de un camión de bomberos con capacidad para 8.500 litros de agua y de ocho camionetas para ayudar al combate de unos incendios forestales que arrasaron miles de hectáreas en la provincia de Corrientes.

Maratea se ha convertido en el influencer argentino más reconocido por sus campañas solidarias.

La adquisición de un costoso medicamento para una bebé de 11 meses con atrofia muscular espinal; el viaje al Sudamericano de Ecuador para una delegación de 35 atletas y entrenadores argentinos; ayuda económica para una pareja que fue atropellada por una camioneta policial en Cozumel (México); y el traslado a Barcelona para que un niño de 6 años que padece un cáncer recibiera un tratamiento fueron algunas de las muchas cruzadas solidarias que encabezó el joven, oriundo de la localidad bonaerense de San Isidro.

La polémica no ha estado ausente en sus campañas. Tras darlas por concluidas, Maratea suele organizar colectas para su propio beneficio, con el sincero argumento de que no es la Madre Teresa de Calcuta, sino que es un joven que deja de lado muchas actividades personales para juntar dinero para quienes lo necesitan. «No me quieran hacer comer el verso que dice que quien ayuda debe ser pobre. Tengo ambiciones como todo el mundo y merezco algo por lo que hago», suele afirmar.

Las críticas reaparecieron en la última iniciativa de Maratea, cuando se puso al frente de una colecta que organizó para que Independiente pudiera saldar parte de una deuda con América. En pocas semanas, la campaña logró recaudar los 3 millones de dólares que el club argentino giró hace unos días al mexicano por el fichaje impago del delantero paraguayo Cecilio Domínguez, una operación que le trajo serios dolores de cabeza a las alicaídas arcas del siete veces ganador de la Copa Libertadores.

Al responder a algunas objeciones de hinchas y periodistas, el joven puso los números sobre la mesa y aseguró que el porcentaje de la colecta con el que se quedaría estaría destinado a pagar su salario y a costear los gastos administrativos del fideicomiso que debió organizar.

Aunque aún no comenzó la aventura de Messi en la MLS, los fanáticos de Newell’s Old Boys ya tienen una idea a disposición para ilusionarse con ver algún día al capitán de la selección argentina con la camiseta roja y negra del equipo del que es confeso hincha.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *